domingo, 16 de agosto de 2015

Los Trasvases


Si, el agua es un bien común que debe ser compartido. COMPARTIDO NO ES ESQUILMADO
Esquilma (Tercera acepción RAE):
Menoscabar, agotar una fuente de riqueza sacando de ella mayor provecho que el debido.

Las fotografías que incluyo en esta entrada, no son de ahora. Pertenecen a un reportaje que hice en octubre de 2006, ¡hace nueve años! !Qué poco ha cambiado el panorama¡

La constante de los gobiernos nacionales y a veces apoyados por los regionales de Castilla la Mancha, es la de empobrecer despiadadamente los pueblos ribereños de los embalses en la cabecera del Tajo.

No se trata de negar el agua que sobra a ninguna otra comunidad, Yo creo en el reparto de la riqueza, todos tenemos derecho a participar y beneficiarnos de los recursos naturales, pero no se puede dejar en la indigencia a unos en favor de otros, aunque estos lo necesiten, que no voy a valorar quien lo necesita más.

Repito para que no haya malos entendidos, las fotografías son de octubre de 2006, pero pasarían por ser de ahora mismo.

!!A ver si aprendemos de los errores¡¡

Curso del Río Tajo. Al fondo el puente de la N-204 que cruza el 'embalse' 




Árbol petrificado por el lodo del fondo del embalse 
'Playa' de Sacedón





























Zona desecada próxima a Durón

El curso del río Tajo en lo que sería la cola del pantano. Al fondo las fumarolas de Trillo

Detalle del río Tajo

Un bonito día de playa, lástima que el agua se ha ido



sábado, 8 de agosto de 2015

Catalogación, palabras clave y campos IPTC


La etiquetación y catalogación de las fotografías es la parte más tediosa del trabajo fotográfico, al menos desde mi punto de vista.

Es además la que aparentemente consume un tiempo excesivo en el conjunto del proceso. Sin embargo una meditada organización y un etiquetado preciso compensará con creces el tiempo empleado en estas tareas.


Río Matarraña a su paso por Beceite


Pensemos en un archivo no excesivamente grande, 30.000 fotografías por ejemplo, en el que evidentemente los temas, los proyectos, el contenido de las fotografías o el equipo con que se han hecho son muy dispares. Si en un momento determinado necesitamos aportar a un trabajo una imagen que contenga medios de locomoción no contaminante impulsados por el esfuerzo humano, seguramente que este tipo de fotografías las podemos encontrar en reportajes de viajes exóticos, de deporte, de ecología o contaminación, pero también en otros reportajes de cualquier otro tema como documentos que se tomaron paralelos al proyecto principal.


Pues bien, localizarlos en toda la base de datos con las palabras clave, transporte, vehículos, contaminación, retrato con ambiente, puede ser suficiente.


La dificultad del proceso de etiquetado radica principalmente en elegir etiquetas muy descriptivas y genéricas a la vez y en no incluir demasiadas en cada fotografía porque si no la selección es totalmente vana.

Sin embargo desde el punto de vista profesional el caso es bien diferente, ya que cuando las fotografías las colocamos en un banco de datos o en una agencia, lo que interesa es que cualquier referencia de búsqueda del usuario haga aparecer nuestro trabajo, con la limitación de la lógica. En este caso cuantas más etiquetas haya que tengan relación con el tema, aunque sea indirectamente, mejor.


La metodología de la administración de documentos regula la producción, el control , la ordenación y el uso de archivos. El archivo es el conjunto de documentos organizados y almacenado en cualquier tipo de soporte. Cada fotografía es un documento y estos se agrupan en carpetas las cuales sirven para integrarlos en el archivo

La ordenación tanto de carpetas como de documentos, se realiza automáticamente por defecto según la configuración general del sistema operativo o del programa que gestiona el archivo, siendo la norma más extendida la ordenación alfanumérica creciente o decreciente.

Por tanto se trata de que con el proceso de ordenación se relacionen los documentos y las carpetas según su contenido, el cual tendrá una denominación que debemos proporcionar nosotros.
La catalogación más básica consiste en usar las nominaciones y carpetas que por defecto proporciona el sistema operativo del ordenador. Partiendo del sistema operativo hay que crear una estructura de directorios, subdirectorios y documentos que sea fácil de entender y recorrer.


Según se puede ver en la imagen, he partido de un disco específico para colocar todas las fotografías, al que he llamado "Trabajo", de el cuelga un directorio principal, "Digitales", en el que a su vez he creado cuatro directorios: "Animaciones", Fotografías I", "Fotografías II" e "iPhone".
Siguiendo la estructura de este árbol de directorios, he abierto como ejemplo el contenido del directorio de Mayo de 2015, perteneciente a fotografías realizadas en Asturias.

Observar que por el nombre de los documentos se puede ver directamente el tipo de formato (CR2 corresponde a RAW de Canon) y la fecha en la que se tomó. El nombre está formado por una cadena numérica que indica el año, el mes, el día del mes y un valor ordinal de cuatro dígitos. De tal modo que con solo ver el árbol de directorios puedo localizar inmediatamente las fotografías tomadas en un lugar determinado y en una fecha en concreto. El nombre dado a cada fotografía lo hago en el momento de la importación utilizando ajustes preestablecidos de Lightroom. Otros programas de edición utilizan secuencias automáticas parecidas para cambiar el nombre original de la fotografía por otro más intuitivo.
Esta es la primera catalogación que hago de mis documentos fotográficos basada en el sistema operativo.


Sin embargo hay métodos más sensibles de localización, basados en etiquetas que se añaden a cada documento (fotografías en nuestro caso). Se trata de crear una lista de palabras clave que definan el contenido de la fotografía para facilitar directamente su búsqueda, sin entrar en el árbol de directorios.

La fotografía digital permite que se introduzcan junto a los datos que componen la fotografía en si misma, otros datos que definen el modo, características, situación, configuración de la toma, y cualquier información relevante que tenga que ver con el documento fotográfico. Son los metadatos.
Los metadatos se pueden definir por tanto como el  conjunto de datos que dan información sobre otros datos.

Los metadatos permiten que la información de una fotografía sea transportada con ella para que pueda ser entendida y utilizada por otro software, hardware y usuarios finales independientemente del  formato del archivo.

Esto le da un valor añadido a la fotografía tanto para aficionados como para fotógrafos profesionales. Para los primeros la posibilidad de encontrar rápidamente dentro del archivo una fotografía buscándola por cualquier parámetro facilita la visualización, recuperación y en su caso la reedición de la misma.

En cuanto a los profesionales, toda la información relativa a derechos de uso, autoría, direcciones y datos de contacto, así como otras de carácter puramente administrativo irán permanentemente ligadas a la imagen en su recorrido por agencias y publicaciones. Todos estos metadatos se recogen según la especificación del International Press Telecommunication Council en los campos IPTC ((http://www.iptc.org).

De todos los campos IPTC el que da mayor flexibilidad para la búsqueda de una imagen dentro de un archivo determinado es el correspondiente a las palabras clave.


Las palabras clave son el modo más fácil y flexible de hacer anotaciones de búsqueda en tus fotos. Para hacerlo bien y que sea realmente efectivo y flexible, hace falta cierto grado de disciplina y perseverancia.

Cuantas palabras clave deben ir en cada foto, es una opción personal y que varía fundamentalmente según el uso que se la quiera dar. Si la fotografía se va a vender a una empresa de stock, o se va a colocar en una banco de datos, lógicamente para que sea visible por los buscadores, hay que colocar todas las palabras que tengan algo que ver con la imagen o con los sentimientos y emociones que pueda provocar, por ejemplo, tristeza, añoranza, melancolía, risa, amor, etc. También se pueden incluir los colores que tienen cierta relevancia en la imagen, y por supuesto las palabras que definen lo que representa: su posición geográfica, monumentos, ciudades, países, personas, cosas, acciones, etc.

Con todo esto es posible que en una imagen haya 20, 30 o más palabras clave. El límite lo define el propietario o quizá la empresa que hace de intermediaria en la venta.

Por otro lado para la mayoría de los aficionados, las fotografías que son para uso particular seguramente que con 8 o 10 palabras es más que suficiente para encontrar la imagen que se busca en el archivo fotográfico.


El seguimiento del uso de la imagen, su trazabilidad de uso, se recoge en los campos IPTC los cuales incluyen campos para búsqueda, descripción, propiedad intelectual, autorías, derechos de imagen y términos de uso.

El estándar para fotografía IPTC es aceptado a nivel mundial por la mayoría de empresas de software, distribuidores de imagen y profesionales de la fotografía.

Hay dos grupos de campos los IPTC CORE y los IPTC EXTENDED. La estructura de ambos, toda la información relativa al modo de cumplimentarlos, los códigos, las palabras correspondientes a su Vocabulario Controlado (CV) y la información de la organización Internationa Press Telecommunications Council (IPTC) se puede encontrar en su página oficial.

En este enlace podéis descargar el documento .PDF original con los protocolos completos de las dos estructuras IPTC.

Las tablas que pongo a continuación son un resumen traducido del contenido de los campos del IPTC CORE 1.2 de octubre de 2014, extraídas del documento .PDF al que me refiero en el párrafo anterior. Es el más habitual , ya que el extendido se centra mas en condiciones puramente administrativas.

Metadatos IPTC Photo: Core 1.2 Octubre 2014

Descripción de los campos en castellano según aparecen en Lightroom (*), el nombre del campo también aparece en inglés, según lo nombra el IPTC.org



Los campos de Copyright corresponden a la sección de Estado, a pesar de que en Lightroom aparecen como una sección aparte.


Campos IPTC correspondientes
a la fotografía de la
cascada del río Jerea
La imagen es la captura de pantalla de los datos IPTC de Lightroom correspondientes a la imagen de la cascada del río Jerea.

Los usuarios de Lightroom no necesitan recordar el significado de cada campo, ya que al colocar el puntero sobre el nombre del mismo, aparece un cuadro con su descripción.
Debido a la traducción, es muy fácil equivocarse con dos campos: Titular en la sección Contenido y Título en la sección Estado.

El título no tiene que ser una definición corta de la imagen como podría pensarse en principio, puede ser una cadena de texto que indique una referencia o el nombre del documento. Sin embargo el titular hay que verlo como la descripción corta de la imagen: Dar un Titular a la imagen.


Hay otros datos que también se incorporan como metadatos a la imagen, son los EXIF (EXchangeable Image File Format)

Este grupo de metadatos contiene toda la información relativa al equipo fotográfico y los ajustes y características de la toma. Estos datos los pasa directamente el software de la cámara y el software de procesado.

En cuanto al equipo, la información indica el fabricante de la cámara, su número de serie, el propietario (si es que la cámara permite poner este dato), la lente con su marca y modelo, flash, etc.

Referente a la toma se guardan la fecha, la abertura, velocidad , ISO, modo de disparo, tamaño en pixeles, formato, etc.
EXIF fue un protocolo estándar creado por JEIDA (Japan Electronic Industry Development Association), pero dejaron de actualizarla y la última versión, la 2.2, es de 2002.

Cascada del río Jerea en Pedrosa de Tobalina
Actualmente hay una organización con las siglas EXIF que en su página web (http://www.exif.org) dice que es mantenida por JEITA (Japan Electronics and Information Technology Industries Association) pero sin embargo piden donaciones en plan crowdfounding. Como opinión personal se me hace muy extraño que no se haya producido ninguna actualización y que desde la pagina de JEITA no haya ninguna reseña hacia EXIF como partícipes de desarrollo.


Según que programa se utilice en el procesado, las modificaciones y ajustes que se realizan en las imágenes también pueden formar parte de los metadatos, y como tales se guardan junto a los datos de imagen siguiendo el protocolo XMP

El eXtensible Metadata Platform, es un protocolo Open Source creado por Adobe en lenguaje XML y de libre disposición y modificable a través de las herramientas SDK que proporciona Adobe.

Toda esa información se puede incluir como metadatos en el cuerpo de los archivos JPG, TIF, PSD y DNG para mantener durante todo el recorrido de la imagen, usando software compatible, la trazabilidad.

Observar que en la captura de pantalla en la que describo la configuración de carpetas y documentos, al principio de la entrada, junto a los archivos de imagen con extensión .CR2, hay otros con el mismo nombre pero con extensión .XMP, esto es debido a que en los archivos de imagen tipo RAW no se puede incrustar como metadatos la información de ajuste y manipulación de la imagen. Estos archivos que van asociados a la imagen se denominan "archivos sidecar".

El contenido XMP es un protocolo estándar reconocido por la mayoría de los software de procesado y edición, sin embargo su inclusión como metadatos en los datos de la imagen es una elección del usuario.

Desde Lightroom se puede hacer en los ajustes de catálogo como opción por defecto, sobre una o varias fotografías seleccionadas desde el menú Metadatos del panel Biblioteca, o bien en el cuadro de dialogo Exportar.


Enlaces que aparecen en esta entrada:

IPTC (International Press Telecommunication Council) - http://www.iptc.org
CÓDIGOS IPTC Y VOCABULARIO CONTROLADO - http://www.newscode.org
EXIF (EXchangeable Image File Format) - http://www.exif.org
JEITA (Japan Electronic and Information Technology Association) - http://www.jeida.or.jp
ADOBE - http://www.adobe.com
DESCARGA IPTC CORE EN .PDF ORIGINAL En este enlace

sábado, 1 de agosto de 2015

El pescador

Los fotógrafos de paisaje y naturaleza tienen la mala costumbre de buscar los sitios más inaccesibles para intentar conseguir un punto de vista de un paisaje que no sea el típico.


Incluso en los sitios más comunes y populares le dan vueltas al paisaje para evitar caer en lo convencional.
Puede ser buscando las horas más propias para conseguir que la luz se acomode a sus gustos, como colocarse en el lugar más inapropiado para la seguridad, o elegir los peores momentos meteorológicos.
Mi experiencia en estas lides me ha llevado a colocarme en estas situaciones, y aunque no lo digo como si se tratara de un acto extraordinario ya que hay miles de aficionados en el mismo caso, mis posibilidades físicas no están muchas veces a la altura de lo que sería deseable. Debo decir también en mi descargo que los riesgos que asumo los tengo controlados (al menos eso quiero creerme).
Pues bien, si la fotografía es en la costa, casi siempre he encontrado un pescador (de caña) o indicios de que allí han estado pescadores, por muy dificil y peligroso que a mi me pareciera el lugar.
Esta reflexión me lleva a pensar que los pescadores de caña en el mar son tan imprudentes como los fotógrafos de paisaje, aunque esta imprudencia sea siempre para conseguir las mejores piezas.

La historia de esta fotografía es la de la espera, haciendo tiempo y buscando localizaciones para futuras sesiones.


La idea que llevaba en la cabeza era la de una puesta de sol a través de un puente natural de piedra sobre el mar. Era pronto, estuve buscando la posición más adecuada para lo que yo quería, hice unas fotos de prueba, comprobé que el sol se pondría de tal manera que teñiría el fondo del cielo a través del puente y que su reflejo sobre las aguas moviéndose lentamente con la subida de la marea daría un color a la escena que yo ya había visto en mi cabeza ...
Me acerque a las moles de roca próximas y empece a disparar a contraluz utilizando de suelo las piedras y las algas que la marea aún no había cubierto. Entonces es cuando me di cuenta de la pequeñísima silueta del pescador sobre el borde del acantilado.
Me llamó la atención sobre todo porque yo había estado valorando la posibilidad de llegar hasta allí, pero la deseche por que me pareció que podría ser peligroso.

 Las nubes empezaban a cubrir el cielo cuando aún quedaban más de dos horas para que empezase el atardecer.


Lo típico del cielo asturiano es que aparezca nublado. Sin embargo las nubes muchas veces acentúan la escena, me decía para mi y se lo decía para convencerme a Pilar, mi mujer que siempre está conmigo en estas circunstancias.
Seguramente en el ocaso aparecerá algún claro, pensaba.
Las nubes se tornaron grises, oscuras, bajas y el cielo se cerró.
Recogimos los bártulos pasadas las once, ni puesta de sol, ni luces, ni estrellas ni nada. ¡Y encima empieza a llover!